
Es insípido, inodoro e invisible: el monóxido de carbono es un peligro invisible. Así pues, no importa si la chimenea es nueva o si la calefacción o el sistema de gas u otros sistemas de combustión son modernos o ya están anticuados: siempre existe el riesgo de que se forme demasiado monóxido de carbono con peligro de muerte para los residentes.
El detector de CO de ABUS advierte a tiempo y salva vidas: si la concentración de monóxido de carbono en una habitación supera considerablemente el nivel normal, el detector advierte de ello con una alarma de gran potencia acústica. El detector de CO se fija en la pared y se puede colocar sobre estanterías o cómodas.¿Desea obtener más información sobre el detector de CO?